"Como preveía ha sido una etapa de desgaste, en la que ha hecho mucho calor, se ha ido a un ritmo vertiginoso desde la salida y nunca se ha parado. Con eso se explica la falta de ataques de cualquier corredor importante de la general, porque el valle después del Tourmalet es una zona en la que hace muchísimo viento y siempre en contra", excusó el abulense que aún no ha intentado descolgar a sus rivales con un ataque.

El ganador de dos etapas en el Tour comentó el final de la etapa. "Quitando esos 25 últimos kilómetros en los que el viento ha entrado de una manera un poco más favorable, el resto lo ha hecho siempre en contra, haciendo muy difíciles los ataques", puntualizó.

"Para mí ha sido un día más en este Tour de Francia, lo he pasado sin ninguna dificultad, más allá de las que ofrecía la orografía, y mañana llegamos al primer día de descanso, en el cual espero recuperar fuerzas y afrontar el resto de la carrera con la misma ilusión y las mismas ganas que mantengo en este momento", concluyó esperanzado.

El francés Pierrick Fedrigo se apuntó la novena etapa tras superar al sprint al italiano Franco Pellizotti en la esperada jornada del Tourmalet, de 160 kilómetros entre Saint Gaudens y Tarbes, en la que Carlos Sastre entró en el puesto 42 con los favoritos, a 34 segundos.

El italiano Rinaldo Nocentini conserva el maillot amarillo por delante de Alberto Contador, con Carlos Sastre ocupando la plaza 16, a 2’52”.